Todos sabemos que emigrar significa cambiar muchas cosas de nuestra rutina… incluso a veces anhelamos esos cambios a gritos. Sin embargo, también hay cosas que antes parecían insignificantes y que con el tiempo en el extranjero empezarás a notar y a extrañar, más allá de lo material.
1. Hablar libremente con desconocidos
Atrás quedó lo de compartir tu vida con el parlanchín taxista y consultar tus intimidades con la doña que está frente a ti en una cola: la interacción con los desconocidos quedará reducida a momentos fortuitos. Créeme, aunque ahora te parezca fastidiosa la señora entrometida que te pregunta si al que le escribes tanto es tu novio, algún día la extrañarás.