Mexicali es una de las ciudades más calientes del mundo. Durante el verano el termómetro puede llegar a los cincuenta grados centígrados y la sensación térmica puede ser aún mayor. ¿Te puedes siquiera imaginar esa cantidad de calor? ¿Cómo le hacen los cachanillas? Seguro que tienen algunas habilidades secretas que los ayudan a soportar esos calorones, pero mientras investigamos de qué están hechos los cachanillas y cómo pueden sobrevivir en un lugar donde se pueden freír huevos sobre la acera, aquí van unas recomendaciones básicas con todo lo que he aprendido para sobrevivir un verano en serio… un verano como los de Mexicali.
Olvídate de la chamarrita por si refresca en la noche
¡No refresca nunca! ¡No hay fresco! Guarda todos tus suéters y cuida que no estén a la vista. Solo con verlos desprenden calor y de eso ya tendrás suficiente. Pero ojo…
La refri es el aire acondicionado de los cachanillas…
Y está en todas partes. Si no estás acostumbrado a la climatización, una pequeña pashmina o chal te ayudará a sobrellevar la resequedad y a mantener la temperatura en nariz y garganta. La refri se hace presente en restaurantes, cines, centros comerciales y a veces parecería que quieren imitar el ártico estando en pleno desierto. Ya te acostumbrarás… tienes qué.
Evita los brazos bicolor
Manga larga, un trapo, una toalla pequeña, un calcetín o cualquier tela fresca que te proteja del sol mientras vas en el coche. Ya sea de piloto o copiloto, el sol tiene para todos y un síntoma de inexpertos en Mexicali es ver brazos con dos tonos bien marcados.
Bloqueador
Si encuentras del 110% no lo dudes. Llévate tres.
Ventanas polarizadas para el coche
Hasta el camión del transporte público tiene los vidrios polarizados. Por algo será. Este es uno de esos casos en los que hay que tomar el consejo de los locales de inmediato.
El reflector de sol es imprescindible
Esa cosa que usan en las playas de Europa para broncearse también sirve para cubrir las ventanas del coche. No evitará que el carro se caliente pero tal vez evite que el volante se te derrita y que el hornazo al entrar al coche sea un poquito más llevadero. Eso sí, con o sin reflector…
No dejes nada en el carro a la vista del sol
Uno no sabe qué cosas tienen la capacidad de derretirse hasta que las dejas dentro de un coche en Mexicali. Tu chapstick, los tuppers, los pasadores y broches para el cabello… si lo valoras no lo dejes en el coche. ¡Punto!
No abras la puerta del coche y te subas inmediatamente
Te puede dar un golpe de calor. Lo más recomendable es abrir la puerta y retirarse rápidamente para dejar que salga la ola de calor. Con cuidado y despacio —para evitar quedarse sin huellas dactilares— baja las ventanas. Sin subirte completamente, prende el coche. Enciende el aire. Ahora súbete y tómalo con calma… ¡y cuidado con el volante!
No caminar bajo el sol en ningún momento del día durante el verano
Como verás, muchas de estas instrucciones son para conducir en Mexicali. ¿Puedes adivinar por qué? Pues porque no deberías estar en la calle en el día a menos que sea para transportarte. Nada tienes que hacer a las dos de la tarde en una banca comiéndote una nieve, no aplica ir a la tienda que está a dos cuadras, tampoco es viable un picnic en el parque, esas postales no existen en Mexicali. ¡Es desierto!
Busca la sombra siempre
Buscar estar lo más cercano a la sombra. Cualquier pedacito es bueno, no la dejes ir, búscala. Para estacionar el coche, para esperar el camión, para ir de un punto a otro, hay una regla de oro: por la sombra, siempre.
La ropa de verano
Tu ropa de verano no sirve en Mexicali. En Mexicali lo que quieres es llegar a tu casa para subirle a la refri y poder andar bichi.
¿Qué hacer un fin de semana de verano en Mexicali?
¡Vete a la Cachanilla! Al Panchitos a comer comida china y después al cine. Vete por una chabela a La Conga, a recorrer los tap rooms de cerveza artesanal, a echarte unos burritos y ver el atardecer en La Rumorosa o las estrellas en el Cerro el Centinela. ¡Opciones hay! Solo sigue las instrucciones básicas para poder disfrutar del verano en Mexicali.