Los mexica veían la vida como un breve instante sobre la tierra, así que tenían muy presente su fugacidad y recibían a la muerte como parte de un ciclo natural. Sin embargo, la partida de los seres queridos era, como ahora, muy dolorosa, así que para despedirse se llevaban a cabo ritos funerarios que garantizaran su descanso eterno.
“¡En buen tiempo vinimos a vivir,
hemos venido en tiempo primaveral!
¡Instante brevísimo, oh amigos!
¡Aun así tan breve, que se viva!”.Nezahualcóyotl, fragmento de “En buen tiempo vinimos a vivir”.
Crédito: @Xolito_magico