Cuando hablamos de la gastronomía mexicana, pocas veces mencionamos a las bebidas sin alcohol que suelen acompañar nuestras comidas, como las legendarias aguas frescas mexicanas, servidas generosamente en mercados y restaurantes de todo el país.
Las aguas frescas se hacen mezclando agua con jugos de frutas, verduras, semillas, flores, granos y cereales, a los que se le agrega azúcar. Las más populares son el agua de Jamaica, la de limón, la de naranja, la de tamarindo y la de horchata de arroz (foto). ¡Aunque hay cientos de sabores!