Crédito: Lau B

Cómo viajar (casi) gratis por Buenos Aires

Ciudad de Buenos Aires
by Verónica Roselló 21 May 2018

Aprovechá los tours gratuitos.

Varias agrupaciones de turismo ofrecen tours guiados por distintos lugares de interés de la ciudad en los que el precio lo pone el usuario, de acuerdo al valor de la experiencia. Hay recorridas por el barrio de La Recoleta, San Telmo, Palermo, por el corazón histórico de Buenos Aires, entre muchas más alternativas. Free Walks Buenos Aires, Free Tours, y Strawberry Tours son algunos de los grupos que forman parte de este movimiento, cuya intención es que cualquiera pueda acceder a una visita guiada adaptada a su presupuesto.

Conocé la ciudad corriendo con Running BA.

Si sos runner, la ciudad ofrece recorridas gratuitas guiadas por profesores de educación física en las que se visitan distintos puntos de Buenos Aires, a pura adrenalina. El paseo dura dos horas y van haciendo paradas de descanso en los sitios de interés. ¡Una forma original, diferente y gratuita de conocer nuestra hermosa ciudad! Run, Forrest, run!

Visitá nuestros museos.

La ciudad de Buenos Aires tiene una importantísima cantidad de museos de arte nacional e internacional, que nada tienen que envidiarles a los mejores museos extranjeros. Muchos de ellos son públicos y de acceso gratuito (o casi). El Museo Nacional de Bellas Artes, por ejemplo, es uno de los más importantes de América Latina y el más importante del país, con un patrimonio que incluye obras de Goya, Rubens, Van Gogh, Modigliani, El Greco, Rodin, Picasso, Rembrandt, Antonio Berni, Cándido López, Prilidiano Pueyrredón y Fernando Fader.

El museo de Arte Moderno y el museo de Arte Contemporáneo están uno al lado del otro, en el barrio de San Telmo. Al primero se puede ingresar gratis los martes, y la entrada general el resto de los días es de $30. En el de Arte contemporáneo, se ingresa abonando $80, menos los miércoles, que el valor de la entrada es de $50.

Conocé la ciudad a través de su arte urbano.

En los últimos años, distintos artistas dedicados al graffiti y al muralismo fueron coloreando distintos espacios de la ciudad, dándole su toque único. Se organizan recorridas gratuitas por los barrios de Palermo, La Boca, Barracas, y Coghlan para descubrir y conocer las obras que estos artistas urbanos hacen en la ciudad.

Disfrutá de cada uno de los parques porteños.

Cada barrio tiene sus parques hermosos, llenos de árboles y de flores. Son una excelente opción para hacer un picnic, para participar de la vida local o para simplemente tomarte un descanso en “la ciudad de la furia”. El gobierno de la ciudad ofrece clases gratuitas de yoga o de salsa en las plazas. Aquí podés fijarte los horarios.

Crédito: Lau B

Entre los parques más lindos (o más famosos) se encuentran los Bosques de Palermo, el Jardín Botánico Carlos Thays (los dos en Palermo), el Parque Centenario y el Parque Lezama, las Barrancas de Belgrano o Parque Patricios.

Visita la Reserva Ecológica Costanera Sur (de día ¡o de noche!).

La Reserva Ecológica Costanera Sur es el espacio verde más grande la la ciudad y de mayor biodiversidad. Está entre el barrio de Puerto Madero y las costas del Río de la Plata. A lo largo de los senderos que la recorren y llegan hasta el río se observan distintas especies de aves, mamíferos, anfibios, reptiles y vegetación autóctona como pastizales de cortaderas y bosques de alisos. Se puede recorrer a pie o en bicicleta deteniéndose a mirar la ciudad desde la reserva, una de las mejores vistas de la ciudad. Un oasis de naturaleza agreste en medio de la urbe. ¡También hay caminatas nocturnas bajo la luz de la luna!

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Recorré la ciudad en bici.

En Buenos Aires existe hay un sistema de préstamo de bicis para circular por la red de ciclovías protegidas, no sólo para los residentes sino también para extranjeros. Con un simple trámite se puede acceder al servicio e ir de un punto de interés a otro pedaleando, o conocer los hermosos parques que embellecen la ciudad.

Caminá, caminá ¡y caminá!

Buenos Aires es una ciudad que se puede conocer caminando, dado que los sitios más importantes están a poca distancia unos de otros. Además, recorrerla de a pie permite observar con detalle sus edificios, sus cúpulas y su arquitectura única. Para ir de un barrio a otro, como alternativa, está la red de subtes, que está muy bien señalizada.

Aprovechá las actividades culturales gratuitas.

En cada estación de subte hay al menos un músico tocando y, en más de una esquina de la ciudad, podés encontrar a un grupo tocando música de muy buena calidad. Los domingos en San Telmo, por ejemplo, hay orquestas de tango tocando en la calle.

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También te recomiendo consultar las actividades de la Usina del Arte y el Centro Cultural Kirchner, donde todos los fines de semanas hay recitales gratuitos de jazz, rock, folklore, música de cámara y música para niños, además de muestras de arte y actividades recreativas para toda la familia.

Andá a bailar tango a la Glorieta de las Barrancas de Belgrano.

Todos los sábados y domingos por la noche se baila tango en uno de los más bellos espacios de la ciudad, la Glorieta de las Barrancas de Belgrano. Aunque no seas un experto en tango, te va a encantar participar de una milonga al aire libre y bajo las estrellas, con más de 300 bailarines de todas las edades y todos los niveles, desde los más avanzados hasta los principiantes.

Recorré el Paseo de la Historieta (Puerto Madero y San Telmo).

Acá vas a aprender sobre la historia de la Argentina a través de los personajes de historieta más populares. El recorrido comienza en el Museo del Humor y termina en la esquina de Defensa y Chile (San Telmo) con la estatua dedicada al Mafalda, la ídola de los argentinos.

Este paseo, que va enlazando a los personajes más emblemáticos y populares de este género en la Argentina, incluye 16 puntos y es ideal para recorrerlo en una cálida noche de verano, parando en los numerosos barcitos, restaurantes y bares notables que hay en el trayecto.

Para comer…

Algunas opciones económicas, ricas y clásicas de Buenos Aires para comer con poco dinero son: choripanes (sanguche de chorizo y pan francés), hamburguesa o sandwich de bondiola en la Costanera Sur.

Hacer un picnic con empanadas en una plaza (¡no te olvides de llevar el mate como hacemos los porteños! eso sí: compralo en un “bazar”, que es donde se consiguen más baratos).

Las pizzas son un clásico riquísimo de la gastronomía de la ciudad. Aca tenés las mejores opciones.

También podés aprovechar los muchos “tenedores libres”, donde vas a poder probar un poquito de todo.

Usá couchsurfing, hostels o airbnb.

No necesitamos explicarte los beneficios de la mayor red de viajeros ¿verdad? Acá podés ver el listado de couchsurfing para Buenos Aires. También los hostels son una muy buena opción, y compartir casa a través de airbnb (en lugar de reservar todo un departamento para vos solo), también abarata los costos.

Date una vuelta por el Planetario Galileo Galilei.

Se trata de uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad por su arquitectura y su historia, y un referente en divulgación astronómica. Con entrada libre y gratuita y la asistencia de un guía se recorre el edificio, en el que podrás ver rocas lunares traídas por el Apolo XI, el Instrumento Copernicano y el antiguo Planetario Zeiss. Para ingresar al domo hay que abonar una entrada de $120, y para acceder al museo, una de $50.

También podés recorrer la ciudad viajando en colectivo o usar este sistema de transportes para ir de un sitio a otro.

Lo único que tener en cuenta es que solo se puede pagar el pasaje con una tarjeta magnética en la que se carga crédito, llamada SUBE. La SUBE se consigue en todas las estaciones de subte y en casi todos los kioscos de golosinas. La ciudad, además, cuenta con una app (CómoLlego) muy útil que te propone las diferentes maneras de llegar de un destino a otro a través de los distintos medios de transporte públicos, cómo combinarlos y cuánto tiempo demora el viaje. Se puede descargar en el celular o consultar la página web.

Además de todo lo aquí mencionado, te recomendamos chequear estas páginas web:

 

 

Que no te quepa ninguna duda: ¡el dinero no compra la felicidad!