“Esta deidad fue la única que decidió no inmolarse para dar vida al nuevo sol que alumbraría a la humanidad”.
Si vives una Noche de Velitas en Colombia, seguro llenarás de color tus ojos y de luz tu alma.
El culto a la muerte es exaltar a la existencia. Se pide que aquello que todavía no está presente esté vivo y sea un canto de sol, de flor y de nacimiento. El canto a la muerte es un canto a la vida.
Más allá de por su aspecto, estas criaturas aterrorizaron a la población porque se sabía que su presencia era un presagio de que algo horrendo estaba por venir.
“Los antiguos habitantes del Valle de México asociaron el ruido de las montañas cuando se mueven las placas tectónicas con el rugido del jaguar”.
¿Qué hacen estos seres vigilando la tumba de un soberano maya?
"Si la madre moría durante el parto, se la consideraba una guerrera que había muerto en el campo de batalla, pues era igual de honorable perder la vida durante el parto que a manos de un enemigo".
“Le gustaban las partes crujientes, como las uñas, los dientes y el cráneo, aunque también consideraba una verdadera delicadeza comerse los ojos de sus víctimas”.
Xochiquetzal, la diosa mexica, fue esposa de Tláloc, de Centéotl, de Ixo Tecuhtli y de Mixcoatl. Con este último tuvo un hijo: Quetzalcoatl.
Ay, qué sonido más terrorífico! Si nos juntamos 100.000 personas con estos silbatos logramos echar hasta al gobernante más caprichoso…
La leyenda urbana dice que la última ejecución de una Tlahuelpuchi ocurrió en Tlaxcala en el año de 1973...
Para los pueblos del Anáhuac, Hunab Ku era el centro de la galaxia, y a su vez, el corazón y la mente del Creador.