Te gusten los chongos o te gusten las minas, si salís, ponete tu mejor pilcha, mucho perfume y andá de levante.
“¿Estás borracha?”. Si le dices eso a tu amiga brasileña, ella va a pensar que está tan fuera de sí... que se transformó en una goma de borrar.
Dejas de decir "pota".
Alí da la sensación de un nuevo amanecer, y su poesía es una invitación a pensar y a actuar.
Aprendiste que los colores primarios son el “verde boteia”, el “amariio patito” y el “negro c…” ¡Cuidado! (mirá que rima)
En Bogotá no hay niños… Hay chinos. Y una madre bogotana no regaña a sus hijos. Les dice, “Chino cochino, eso no se hace”.
"Es admirable que no hubiera un solo niño mexicano del siglo XVI, cualquiera que fuese su origen social, que estuviera privado de escuela”.
Para ti, las mujeres de Cali son las más bellas y sueles repetir el comienzo de esa canción que dice: “Las caleñas son como las flores”...
¿Dónde están los viene-viene que nos “echan aguas” para estacionar o los que empacan las compras del súper? Estos y otros trabajos, en Francia ni existen.
Te emocionas si alguien te dice convencido que parece que tienes 27 años.