"101. Iban a ser 100, pero soy guayaco: El guayaco no recibe un añadido. Quiere su yapa. De ley".
8. La jerga argentina te va a fascinar. 9. Descubrirás que tu otrora perfecto acento argentino ha sido diluido.
“Es que el maestro se la trae contra mí”. “Me vale", dice tu madre, "Tú sólo tienes una obligación: estudiar... ¿o prefieres vender chicles en el semáforo?".
Al nacer guayaco, se te otorgaron ciertos poderes... como el comer agachadito sin regar el jugo en funda, o levantar arroz con cédula y cortar con licencia.
Tu recuerdo de la medianoche del 1ro de enero de 2000 es bastante vago. Esa división la hacés de acuerdo a otro tiempo: antes / después de usar Internet.
8. Suele usar vinchas de flores "tipo" Frida Khalo. 9. Tiene una billetera de papel artesanal donde guarda las extensiones de la tarjeta de mamá y papá.
Al salir del colegio alistabas unos centavitos para comprar limones o mangos con sal, cebichochos, espumilla, bonice, salchipapas o, mmm... una chocobanana.