Tal vez no lo sepas, pero mucho antes de la llegada de los españoles los mexica estuvieron a punto de perder su imperio a manos de un solo hombre, B’otzanga -señor otomí del pueblo de Ndongu-, en una de las batallas más feroces de aquella era.
El nombre de este gran guerrero significa, tanto en náhuatl (Tlilcuetzpall) como en hñä-hñü, “lagartija negra”.