18. El jarocho no dice “Hola ¿cómo estás?”. Dice "¿Qué iris?" 19. Y el niño jarocho no hace un berrinche… (también) ¡¡¡Hace un iris!!!
16. Solo tenele miedo a la muerte y a la mezcla de sandía y vino... 17. Aprendé lo antes posible que un argentino “si no la gana, la empata”.
Si de gordas se trata, tú eres todo un experto: blancas, negras, mixtas o de dulce. Eso sí, con su toque particular de mole, frijoles, queso o salsa.
Pebre. En Chile: salsa criolla típica para el choripán. En el extranjero: pura nostalgia, producto de lo difícil que es replicar un asado fuera del país…
De pronto, una "solicitud de amistad". ¿Quién c** es? Con el tiempo, gano en confianza y suspendo el turno con el neurólogo que pedí cuando tuve amnesia.
Una madre española te prepara comida para una semana en tuppers cada vez que la visitas.
"Los argentinos tenemos dos problemas para cada solución, pero intuimos las soluciones a todo problema".
Te ofendés si te ceban un mate en mate de lata: "¡Ah no! Salí de acá con esa porquería". Ahora usás un porongo como corresponde. Uruguay, nomá.