Piensa que ir de visita a los pueblos de Paraguaná es aburrido. Nada más errado que eso.
Aprendiste a arrancar en cuesta en Parquesol.
Si cada día te reinventas y eres de las pocas que se atreve a usar todo eso que nadie más se atrevería, tu estilo se corresponde con… ¡Tokio!
Te hacés adicto al fernet con coca… Al punto que no parás hasta preparar el "fernando perfecto": 70/30 y a remover con el dedo.
Entrar a un temazcal (símbolo de la tierra que nos da vida) purifica cuerpo y espíritu… ¿Sabías que los colonizadores intentaron eliminarlos por demoníacos?
"Ah, ¿pero tú trabajas?"
Ser fanáticos de un baile que representa un gallo cortejando a una gallina y de comer sándwiches con ingredientes que desbordan…
Todo es motivo de un asado, conocés el verbo “bizcochear” y los sucesos de tu vida se expresan como situaciones de un partido de fútbol.
Paella detector. Tardamos una milésima de segundo en distinguir una paella auténtica de un arroz con cosas.
Por mucho tiempo que tengamos viviendo aquí, no terminamos de entender que una “lágrima” sea clasificada como un café.